Los sistemas adaptativos complejos pueden tener propiedades inesperadas. En la actualidad, la aparición de tales propiedades es muy difícil de predecir.
En la actualidad el estudio de la complejidad es una de las áreas más importantes de la ciencia moderna. Un sistema complejo se define como un sistema que tiene muchos elementos independientes, cada uno de los cuales puede interactuar con los demás. Tomemos como referencia un montón de arena, que puede verse como un sistema complejo, ya que presionar sobre un grano de arena aumenta las fuerzas de presión sobre todos los demás granos de arena del montón, y estos granos, a su vez, responden a esto con una ligera deformación, provocando fuerzas de reacción. La bolsa de valores es otro ejemplo de un sistema complejo en el que los compradores y vendedores cambian su comportamiento a medida que cambian otros compradores y vendedores.
Un sistema como una bolsa de valores, donde el comportamiento de los elementos cambia como resultado de las acciones de otros elementos, se denomina sistema complejo adaptativo o autoadaptativo. Antes del advenimiento de las computadoras electrónicas de alta velocidad, era imposible estudiar sistemas complejos. Estos sistemas son demasiado grandes, demasiado complejos para trabajar con las matemáticas ordinarias. El resultado más importante de los estudios informáticos de sistemas adaptativos complejos es el concepto de una propiedad inesperada . Tome un simple montón de arena como ejemplo.
Si agrega granos de arena a la pila, tarde o temprano, aparecerá de repente un nuevo tipo de comportamiento. Cuando agrega el millonésimo grano de arena, se producirá una avalancha; este comportamiento es fundamentalmente diferente del fenómeno de transferencia de presión que tuvo lugar antes. Es decir, con este millonésimo grano de arena llegamos al punto en que el concepto de «más» se convierte en «otro».
Características de los sistemas adaptativos complejos
Una característica importante de las propiedades inesperadas es que no aparecen gradualmente. Un grano de arena no conducirá a la formación de una millonésima parte de una avalancha, que luego se podría agregar con otras partes similares para obtener una avalancha de un montón de un millón de granos de arena. No verá ninguna avalancha hasta que alcance este millonésimo grano de arena, y solo entonces se formará una avalancha de repente. Creo que se podría hacer una sugerencia muy interesante de que las propiedades de la mente, como la conciencia y la introspección, son propiedades inesperadas de muchas neuronas, algo así como avalanchas que ocurren como una propiedad inesperada de muchos granos de arena.
Si este es realmente el caso, entonces la evolución del sistema nervioso se está acercando al punto en que “más” se convierte en “otro”. Uno de los grandes desafíos a los que se enfrenta la ciencia en la actualidad es desarrollar la capacidad de predecir la aparición de propiedades inesperadas en función de las propiedades de los elementos individuales del sistema. No podemos hacer esto en este momento, y algunos científicos creen que nunca podremos. Creo que hoy es demasiado pronto para dejar de intentar solucionar este problema.
