PLANETAS INTERIORES DEL SISTEMA SOLAR

Los planetas interiores del sistema solar son los cuatro más cercanos al sol y separados del resto por el cinturón de asteroides. Estos son: Mercurio, Venus, La Tierra y Marte.

Los planetas interiores del sistema solar: Mercurio, Venus, La Tierra y Marte.

El sistema solar es un sistema planetario, donde los mayores cuerpos del mismo (planetas) giran alrededor de una única estrella: el Sol. Como se mencionó anteriormente, al ser un sistema planetario los objetos más importantes del mismo son los planetas que lo conforman y por supuesto el sol. Los planetas tienen suficiente masa para que su gravedad supere las fuerzas del cuerpo rígido, de manera que asuman una forma en equilibrio hidrostático prácticamente esférica.

En el sistema solar, los planetas del están separados en dos grupos fundamentales: los planetas interiores y los exteriores. Los planetas interiores son planetas rocosos y de menor tamaño que los planetas exteriores. Además, estos también son nombrados así porque son los más cercanos al sol.

La línea que actúa como frontera entre los planetas interiores y exteriores recibe el nombre de cinturón de asteroides. Este es un anillo constituido en su mayoría por asteroides, como bien su nombre lo dice, y otros cuerpos celestes menores como los meteoritos.

En el siguiente artículo te explicamos cuáles son los planetas interiores del sistema solar, así como sus principales características.

Mercurio, el planeta más cercano al sol de los planetas interiores

Planeta Mercurio.

Mercurio el más próximo de los planetas al Sol, posee una órbita elíptica cuyo punto más cercano se halla a 70,5 millones de km del astro central. Esta órbita es recorrida por el planeta (periodo sidéreo) en 88 días terrestres. Esto lo convierte en el planeta de más rápido movimiento del Sistema Solar.

En ocasiones, observando desde la Tierra, los planetas interiores pueden cruzar por delante del Sol. Este fenómeno recibe el nombre de tránsito. En el caso de Mercurio se producen unos 13 tránsitos por siglo y ocurren aproximadamente en intervalos de 13, 7, 10, y 3 años en los meses de mayo y noviembre. El próximo ocurrirá el 7 de mayo de 2049.

Durante sus máximas elongaciones, la separación angular aparente entre Mercurio y el Sol es relativamente pequeña, variando entre 18° y 28°, hecho que limita la posibilidad de observarlo a los períodos próximos a la salida y puesta del Sol, y siempre a poca altura sobre el horizonte, donde el efecto de la turbulencia atmosférica es mayor.

El pequeño planeta se nos muestra como un cuerpo relativamente oscuro, donde a semejanza de la Luna, existen cráteres de impacto, algunos con una elevación central, los llamados circos, de varias edades, los más recientes con rayos brillantes a su alrededor. Los grandes cráteres poseen diámetros que varían entre los 20 y los 300 km, pero los mayores alcanzan unos 200 km. También se observan llanuras, zonas de magma solidificadas y terrenos irregulares. Aparentemente está cubierto de una fina capa de polvo de centímetros a metros de espesor. El análisis de las fotos revela que la densidad de impactos meteóricos que presenta la superficie actual de Mercurio es del mismo orden que la mostrada por la Luna y Marte. Este descubrimiento tiene gran importancia cosmogónica.

Características físicas

Mercurio es un planeta rocoso, siendo el más pequeño de todos con un diámetro de 4879 km en el ecuador. Este planeta está formado en un 70% de elementos metálicos y el resto de silicatos. No obstante, su tamaño, es el segundo planeta más denso del sistema solar, con un valor de 5430 kg/m³. Esta elevada densidad infiera la existencia de un núcleo muy grande y rico en hierro.

Otra característica importante de este planeta es la existencia de una magnetosfera. Este ha sido comprobado a partir del estudio de la interacción del planeta con los vientos solares. No obstante, aún se desconoce el origen de este campo magnético. Los científicos suponen que una parte del núcleo de Mercurio se encuentre fundido, lo cual posibilitaría la generación de dicho campo magnético.

Movimiento de mercurio entre los planetas internos

La órbita que recorre Mercurio alrededor del sol es la más excéntrica de entre los demás planetas. Las variaciones de distancia entre el planeta y la estrella se encuentran en el rango de los 46 y 70 millones de kilómetros. Su movimiento de traslación en su órbita tarda unos 88 días terrestres.

Venus, el segundo planeta de los planetas interiores.

Planeta Venus.

Según las observaciones realizadas se distinguen en Venus tres clases principales de terrenos. Por un lado, se pueden ver llanuras planas u onduladas, cubriendo un 60 % de área total observada. Además, encontramos depresiones o valles poco profundos que ocupan un 16 % del total de la corteza. El 24 % restante está constituido por terrenos cuya altura es de 1 km superior al de las llanuras, de los cuales una tercera parte pueden considerarse como montañas. La región más destacada es la de los Montes Maxwell de aproximadamente 11 km de altura.

Al igual que Mercurio, en ocasiones se observa transitar a Venus por delante del Sol, pero por poseer una órbita mucho mayor que la de Mercurio las condiciones para que se produzca el suceso se dan a largos intervalos de tiempo. En la época actual los tránsitos se producen por pares, separados entre sí 8 años, y se repiten 105 o 122 años después. El próximo será diciembre de 2117. En siglos anteriores este fenómeno fue utilizado para calcular la distancia de la Tierra al Sol aplicando el método de la paralaje.

Atmósfera de Venus

Las investigaciones espaciales nos han permitido estudiar detalladamente la atmósfera de Venus. Existen en ella unas cuatro capas de nubes formadas por minúsculas gotas de ácido sulfúrico y partículas de azufre puro.

La presión atmosférica en la superficie de Venus es 90 veces la presión atmosférica en la tierra. La temperatura media del planeta es de 464 grados Celsius debido a la alta concentración de dióxido de carbono que provoca un gran efecto invernadero. Increíblemente esto convierte a Venus en un planeta más caliente incluso que Mercurio.

Movimiento de Venus

La órbita de Venus es la más parecida a una circunferencia de entre los planetas interiores del sistema solar. Esta órbita posee una excentricidad inferior al 1.2%. El tiempo total de traslación del planeta en su órbita es de 8 años de tiempo terrestre.

Venus es el planeta que más puede acercarse a nuestro planeta tierra. La menor distancia de acercamiento fue registrada en el año 1850, cuando estuvo solo a 39 514 827 kilómetros.

El movimiento de rotación de Venus es totalmente diferente al del resto de los planetas interiores y exteriores del sistema solar. Este movimiento de rotaciones es en sentido de las manecillas del reloj tomando como referencia el polo norte del planeta. Esto provoca que aquí el sol salga por el oeste y se ponga en el este. El tiempo que tarda Venus en dar una vuelta sobre sí mismo es de 243,187 días terrestres.

La Tierra, nuestro hogar en el cosmos.

Planeta Tierra.

El planeta Tierra es el tercer planeta del sistema solar. Este planeta es el más denso y grande de los planetas internos, y ocupa el quinto puesto de los de mayor tamaño de todo el sistema solar.

Como todos sabéis, hasta el momento es el único lugar conocido del universo que puede albergar vida. Según estudios, la Tierra se formó hace unos 4550 millones de años y el surgimiento de la vida data de unos mil millones de años después.

Atmósfera Terrestre

El planeta tierra cuenta con una atmósfera densa subdividida en capas. Las interacciones de los organismos bióticos han transformado dicha atmósfera durante milenios. En el exterior de la atmósfera terrestre existe una capa de ozono la cual filtra la radiación solar. Además, el campo magnético generado en la magnetosfera elimina las partículas dañinas provenientes del sol.

Características físicas del tercer planeta de los planetas interiores

La superficie del planeta está cubierta en un 71% por agua. No obstantes la Tierra es un planeta rocoso, ya que esta cantidad de agua es solo superficial, siendo la masa planetaria en su mayoría rocas y minerales.

En el interior del planeta tenemos una capa gruesa sólida llamada manto. Por otro lado, el núcleo del planeta está formado por una parte sólida recubierto de una porción liquida. El movimiento de este núcleo líquido es el que genera el campo magnético del planeta que actúa como escudo ante las radiaciones solares.

Movimiento Terrestre

La tierra recorre una órbita elíptica alrededor del sol. Este recorrido tiene una duración de 365 días, lo que representa un año. Además, la tierra posee un movimiento de rotación sobre su eje de una duración de 24 horas que marca un día completo.

Por otro lado, la Tierra cuenta con un satélite natural llamado luna el cual juega un papel fundamental en las condiciones generales del planeta. Entre sus principales funciones está la de producir las mareas y regular el eje de inclinación del planeta. Además, la atracción generada por la luna reduce gradualmente la velocidad de rotación planetaria.

Medio ambiente

Como ya mencionamos nuestro planeta es el único conocido capaz de albergar la vida. Pero en los últimos tiempos, por actos irresponsables de algunas personas pudiéramos ir directo a una extensión global de la vida tal y como la conocemos.

La contaminación ambiental del planeta ha provocado variaciones considerables de su temperatura media. Esto trae como consecuencias la ocurrencia de fenómenos naturales destructivos, tales como tornados, huracanes y tifones. Podemos observar cómo la humanidad, en su inmenso egoísmo, no está preparada para enfrentar epidemias globales, como la del Covid-19 en esta década.

Por eso es necesario tomar medidas para proteger y cuidar el medio ambiente y la biodiversidad de nuestro planeta. Esta es única e irrepetible, y no hay planeta B.

Marte, último de los planetas interiores.

Marte, último de los planetas interiores.

Este planeta se aproxima a la Tierra durante sus oposiciones, cada 780 días, siendo este su período sinódico. Cuando las oposiciones ocurren estando Marte cerca de su perihelio, situación que se repite cada 15 o 17 años, se producen las llamadas oposiciones favorables. En este momento el valor de la distancia entre Marte y la Tierra puede estar entre 59 y poco menos de 56 millones de km, según la proximidad al perihelio.

Durante una oposición favorable el brillo de Marte aumenta hasta 2,9 veces mayor que el de cualquier planeta excepto Venus, y su diámetro aparente alcanza 24 ó 25 segundos de arco. Estas oposiciones son siempre esperadas por los astrónomos para observar el planeta en las mejores condiciones posibles. A partir de 1965 las estaciones automáticas enviadas al planeta y sus inmediaciones, nos han proporcionado una amplia información sobre las características físicas y morfológicas de Marte.

Geología de marte

Se han fotografiado varios tipos principales de formaciones geológicas: grandes planicies cubiertas de cráteres meteóricos muy antiguos; terrenos planos y otros de estructura irregular, montañas volcánicas y algunas de enormes proporciones y regiones donde existen profundos cañones. Los mayores cráteres de Marte tienen hasta 200 km de diámetro y presentan características similares a los lunares, aunque en general son menos profundos y de laderas menos inclinadas. Uno de los más importantes descubrimientos es la presencia de unas 12 montañas de indudable origen volcánico distribuidas por toda su superficie. Entre estas se destaca el Monte Olimpo, la mayor montaña del Sistema Solar conocida hasta el presente.

Este enorme volcán mide unos 500 km de diámetro en su base y tiene una altura de unos 27 km. Su cráter o caldera de 80 km de ancho presenta una compleja estructura donde se aprecian varias bocas de diferentes diámetros. Esto da a entender que gigantescas erupciones deben haber ocurrido en una etapa geológicamente reciente.

Atmósfera de Marte

La composición de la atmósfera de Marte es muy similar a la de Venus, pero su densidad es pequeña. Las sondas espaciales que han descendido en la superficie han registrado una presión atmosférica 145 veces menor que la terrestre.

Otro detalle importante de Marte, sus nubes, son de dos tipos. Por un lado nubes blancas compuestas por cristales de hielo aparentemente análogas a los cirros terrestres. Y, por otro lado, nubes amarillentas que en ocasiones durante las llamadas tormentas de polvo cubren gran parte de la superficie del planeta dificultando las observaciones desde la Tierra.Estas nubes no son otra cosa que polvo levantado por los vientos hasta alturas de 10 a 15 km y que después cae lentamente, a veces durante semanas.

¿Vida en Marte?

En una conferencia de prensa efectuada el 7 de agosto de 1996, la NASA lanzó al mundo la noticia de que, en un meteorito de origen marciano hallado en la Antártica en 1984, se habían descubierto trazas fósiles de bacterias que pudieron haber existido en Marte. Su origen marciano está bastante bien establecido por su composición química similar a la de las rocas analizadas por las naves Viking en la superficie de ese planeta.

Aun hoy en día, la polémica científica suscitada sobre las trazas fósiles de bacterias permanece vigente. Resultados de análisis posteriores realizados por varios grupos de investigación dan un origen terrestre para muchos de los detalles, incluso las supuestas bacterias fósiles. No obstante, la hipótesis original, no ha sido descartada.

Agua en la superficie marciana.

Otra gran incógnita que los científicos tratan de resolver, es la existencia en Marte de agua en grandes cantidades, ya sea en el presente o en fechas remotas. El casquete polar Sur del planeta contiene cierta cantidad de agua congelada, en contraposición al casquete Norte, donde predominan los hielos de dióxido de carbono. Pero las fotos de alta resolución tomadas por la cámara MOC a bordo de la sonda espacial Mars Global Surveyor, han mostrado evidencias de un planeta surcado en el pasado por numerosos ríos y lagos. Esto hubiese requerido de una atmósfera casi como la nuestra.

En las imágenes se observan suelos estratificados situados en el fondo y en las laderas de las depresiones. También el afloramiento de rocas sedimentarias, estructuras que suelen hallarse en lugares donde existieron lagos ya secos. Estas zonas serán las mejores para buscar vestigios de vida primitiva durante las futuras misiones espaciales.

Algunos especialistas opinan que el agua puede hallarse en el subsuelo marciano, en forma de permafrost o hielos permanentes, tal como ocurre en algunas regiones de nuestro planeta, como en Alaska y el Norte de Siberia. La presencia de agua en alguna de sus formas es importante para la futura exploración del planeta por seres humanos.

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